Los últimas avances en las diferentes ramas de la odontología, van dirigidas específicamente a contribuir para corregir el desdentamiento de la población. En este sentido la sobredentadura ha cobrado una gran importancia debido a los múltiples beneficios que ofrece.
Los problemas económicos, culturales y sociales dificultan a muchas personas el acceso a la odontología. Por esta razón, los problemas de este tipo no son necesariamente exclusivo de la vejez, por lo que cada día se hace más común la necesidad de atender problemas de desdentamiento en la población joven.
¿Qué es una sobredentadura?
La sobredentadura es una prótesis que puede ser removible, parcial o total, muy parecida a la convencional pero con la diferencia de que las bases protésicas cubren una o más raíces retenidas. Este tipo de prótesis permite conservar la discriminación direccional, la sensibilidad táctil a la carga y diferenciación del grosor y consistencia de los alimentos.
Estas características permiten que el paciente se sienta como si tuviera dientes naturales, por lo que se acostumbran más fácilmente a este tipo de dentadura. El hecho de conservar el hueso alveolar permite menos posibilidad de trauma en los tejidos, lo que admite más soporte, retención y estabilidad protética.
Está claro que la sobredentadura, constituye una solución rápida y eficaz para resolver defectos congénitos y adquiridos, y en muchos casos se utilizan como prótesis transitorias. Ahora bien, las caries y otras enfermedades periodontales son los problemas más comunes que afectan este tipo de prótesis.
Conservar los pilares depende en gran medida de un minucioso cuidado e higiene dental, por lo que es imprescindible para este tipo de pacientes que se conciencien de su importancia.
La mayoría de las prótesis usadas por los adultos mayores son las dentaduras removibles mucosoportadas. Sin embargo, el hueso alveolar remanente no se encuentra en condiciones para este tipo de prótesis, debido a la estructura osteoporótica que posee. Es decir, presenta una pérdida considerable de su masa ósea.
Esta situación produce que sea más sensible a sufrir pérdidas prematuras de soporte, lo que explica la recurrencia de este problema en prótesis recientemente instalada.
Por otra parte, durante los cambios metabólicos que se producen con el avance de la edad, las mucosas orales se adelgazan y atrofian, lo que reduce la elasticidad de los tejidos sujetos a presión.
En este sentido, la idea es que se puedan mantener la mayor cantidad de piezas dentales posible, de tal manera que la propiocepción periodontal sea la que guie la función masticatoria.
La falta de dentadura, un problema más que estético
La mayoría de las personas que acuden a un odontólogo, lo hacen con fines estéticos. Sin embargo, las consecuencias de la falta de piezas dentales van más allá de la belleza. Esta situación, lleva al paciente a un estado de invalidez, que le provoca una serie de trastornos funcionales, estéticos, psicológicos y sociales.
La pérdida total de los dientes origina una serie de alteraciones en los tejidos orales y peri-orales que es necesario corregir a través de un tratamiento protésico en la cual se podría utilizar una sobredentadura.
Algunas de las consecuencias que produce la falta de dentadura:
Alteraciones faciales:
- Disminución de la dimensión vertical
- Pérdida de soporte óseo para los tejidos de la boca lo que ocasiona distorsión en los labios, pérdida de expresión labial, boca ensanchada.
- Se acentúa la discrepancia entre las dos arcadas, debido a los mecanismos de reabsorción en ambos maxilares. En el maxilar superior predomina la reabsorción en cara vestibular y en el maxilar inferior predomina la reabsorción en la zona lingual.
Estas alteraciones, modifican significativamente el rostro del paciente y lo avejentan.
Alteraciones intraorales:
- Menor zona de soporte debido a la disminución del área mucosa
- Aparición de irregularidades en la superficie de la mandíbula, lo que haría más difícil el asentamiento de una prótesis dental removible.
- Disminución de la sensibilidad epicrítica y pérdida de propioceptores del ligamento periodontal que controla la fuerza de la mandíbula.
- La lengua invade el espacio que antes era limitado por las piezas dentales.
Alteraciones funcionales:
- Incapacidad para triturar los alimentos de manera conveniente, lo que obliga al organismo a utilizar mecanismos compensatorios para la digestión.
- Diferencias morfológicas entre la prótesis y la propia dentadura. Esto produce problemas durante la masticación.
- La persona sin dentadura debe retroceder en el patrón de alimentación, siendo necesario volver a la deglución infantil. Esta falta de estabilidad mandibular provoca una mala deglución del bolo alimenticio y por ende a atragantamientos y dificultades digestivas.
- Problemas al hablar, ya que la falta de dientes hace que se pronuncie de forma deficiente los fonemas o sonidos linguo-dentales y labio-dentales.
En conclusión, la pérdida de las piezas dentales tiene como consecuencia la pérdida de las fuerzas naturales masticatorias, por lo que la función y capacidad original deberá ser reemplazada por una prótesis como la sobredentadura que le permita al paciente recuperar su funcionalidad original.
¿Cuándo recurrir a una sobredentadura?
La sobredentadura se convierte en una de las mejores opciones cuando los dientes remanentes no pueden soportar una restauración fija o removible convencional, cuando es un desdentamiento con uno o dos dientes remanentes en buen estado o cuando el pronóstico para una prótesis completa es desfavorable.
El tratamiento protésico con implantes ha avanzado mucho en poco tiempo, sobre todo en el campo de la investigación científica. Los principios de este tipo de investigación difieren notablemente de los de la prótesis convencional.
Uno de los propósitos principales de una cirugía de implantes, es colocar anclajes para el futuro uso de una prótesis. Esto con la finalidad de conseguir un resultado favorable y duradero. Es importante resaltar, que el hueso maxilar y mandibular es un tejido vivo que no puede ser alterado en una cirugía.
Por otro lado, es de hacer notar que los implantes dentales deben ser trabajados bajo la tutela de profesionales, incluyendo un protesista, el cual va a señalar cuál es la posición más adecuada para el implante en función del tratamiento final.
En este sentido, la cirugía debe seguir el protocolo de cualquier intervención quirúrgica, en el que se debe contemplar un buen diagnóstico previo, exámenes preoperatorios y planificación del tratamiento, este último debe incluir el tipo de rehabilitación, el tipo de implante y los números de implantes a colocar.
Tipos de sobredentaduras sobre implantes
Los problemas de retención de los implantes se han visto resuelto con la innovación de los implantes dentales. Estos son diferentes dispositivos que permiten aumentar el nivel de retención de manera más efectiva que las prótesis convencionales.
El tipo de sobredentaduras sobre implantes dentales van a depender del tipo de ataches, que son los ganchos de anclaje que permitirán fijar la dentadura postiza sin peligro que se muevan constantemente.
Los ataches son unos dispositivos que están formados por dos piezas; una es el macho y la otra es la hembra, la primera se acopla a la segunda encajándose. Generalmente ofrecen una óptima retención, pero necesitan un grosor mínimo para ser efectiva. Esto puede ocasionar que el plástico o acrílico de la prótesis se pueda agrietar.
Los tipos de sobredentaduras según los ataches que utilizan son:
Sobredentadura con barras
Esta modalidad es la más frecuente. Esta opción consiste en dos implantes unidos por una barra, en la que se ejercen cargas menores sobre los implantes ferulizados. Entre algunos de los estudios realizados, este tipo de implante presenta menos complicaciones, mayor retención y menos exigencia de mantenimiento.
La sección de la barra tiene que ser redondeada para que pueda permitir una ligera rotación frontal de la base protésica. Esta rotación del clip, compensa la elasticidad de la mucosa, por lo que la barra debe ser recta y paralela al plano oclusal. Este implante debe ir cementada o atornillada, esta última es la mejor opción cuando no hay suficiente altura.
Sobredentaduras con bolas
Este sistema consiste en colocar unas bolas sobre los implantes independientes o encima de una barra que los ferulice. Es una opción bastante económica porque se puede adaptar la prótesis preexistente y usarla como sobredentadura.
Este tipo de implante también está recomendado, en los casos en que el espacio entre los implantes es tal que la barra invadiría el espacio lingual. Los anillos poseen una parte de polímeros con suficiente flexibilidad para adaptarse al paso de la bola volviendo a su forma original y suministrando retención de anclaje.
La parte interna de este tipo de atache va engarzada en un anillo externo y debe cambiarse regularmente.
Sobredentaduras con imanes
Este sistema de retención de sobredentaduras, es adaptable a casi todo tipos de implantes, debido a su revestimiento hermético con titanio que lo hace resistente a la corrosión.
Esta es una opción que cumple con las exigencias de los pacientes para encontrar una solución fácil, segura, higiénica y económica. El sistema está basado en el principio de dos imanes y se caracteriza porque la fuerza de adherencia disminuye poco a poco al separarse.
Existen dos maneras de aplicación de este tipo de sistema; uno al elaborar una prótesis completamente nueva y la otra adaptando la ya existente.
Sobredentadura con ataches locator
Los locator son unos ataches innovadores, que mantienen el diseño de macho y hembra de los anteriores pero son mucho más pequeños lo que facilita el diseño de la prótesis. Una de las ventajas es que los dientes quedan en una posición más favorable y evita que se parta el plástico o acrílico.
El hecho de ser más pequeños no quiere decir que sean más sencillos, son muy innovadoras ya que la hembra del atache es resiliente y permite que el macho se mueva sin peligro de que se desinserte.
Esta capacidad de adaptación otorga más maniobrabilidad, por lo que se acopla mejor a los movimientos de la mandíbula y los músculos bucales al comer, hablar y gesticular.
Sobredentadura híbrida
Esta sobredentadura se compone de piezas protésicas elaboradas especialmente para acoplarse en un espacio donde se incluyan dientes naturales junto a los implantes. El soporte se lo darán las raíces de los dientes naturales o los implantes. Este tipo de dentadura se utiliza, cuando la mayoría de los dientes han desaparecido.
Este tipo de sobredentadura, también se recomienda cuando hay una pérdida importante de hueso en la mandíbula y el paciente no soporta una dentadura completa. Estas prótesis están elaboradas de acrílico y tienen una barra de titanio en forma de herraduras.
Al utilizar una sobredentadura híbrida en los dientes, éstos deben ser sometidos a un tratamiento del nervio y son restaurados, de tal forma que la prótesis pueda ser instalada sobre ellos. Unas coronas metálicas cubren los dientes para evitar el deterioro. Para colocar la sobredentadura híbrida, se deben colocar entre 4 y 6 implantes en la mandíbula.
Esta prótesis ofrece estabilidad, debido al apoyo de los dientes naturales o implantes utilizados, esto impide que se afloje cuando el paciente está comiendo o hablando. Además se ve mucho más natural y puede restablecer la forma del rostro original
Funcionamiento de las sobredentaduras
El tipo de sobredentadura a utilizar, dependerá de las necesidades del paciente. Existen diferentes opciones, como la sobredentadura retenida con bolas, la sobredentadura retenida con barras y sobredentadura retenida con imanes, entre otras.
Estas opciones son elaboradas a partir de una base de acrílico que simulan las encías y las piezas dentales pueden ser también de acrílico o porcelana, de tal forma de simular lo más cerca posible la apariencia natural de la dentadura.
Cualquiera de los tipos de implantes van a necesitar entre dos y cuatro implantes, que le den suficiente soporte a la sobredentadura. Estos deberían ser colocados en la región anterior de la cavidad oral, debido a que en esta parte hay una estructura ósea más grande, incluso si la falta de las piezas dentales data de años atrás.
Igualmente, la ausencia de estructuras vitales, como nervios, garantizan que los implantes dentales no incidan de manera negativa sobre partes anatómicas importantes. La sobredentadura tiene como gran ventaja que el paciente no necesitará injerto de hueso o tejido blando. Al contar con la raíz dental, se garantiza mantener más estructura ósea.
Más prótesis dentales
Licenciado en Odontología por la Universidad de Lima. Especializándose en Ortdoncia. Ha realizado un Máster en Periodoncia y otro Máser en Implantología Oral Avanzada.